lunes, 27 de septiembre de 2010

Mercados, Bilderbergs y otras consideraciones que conducen a la tristeza y al llanto


"Dadme el control sobre la moneda de una nación,
y no tendré por que preocuparme de aquellos que hacen sus leyes."

Mayer Amshel Rothschild (1743-1812)

Cada vez es más evidente que los gobiernos, "democráticos", se están quedando sin poder, mandan los mercados, manda el dinero, el dinero pero no solo él, los que mandan son los que tienen EL PODER. Esto siempre pasó dirán algunos, pues también es verdad, que duda cabe.

Sin embargo, nos encontramos con unos gobiernos más débiles, que además, para intentar disimular, están creando una cantidad de leyes espantosa. Parece que el Estado da por perdido el control económico, se lo ha cedido de buena gana a "los mercados" y la única forma de justificar su papel es legislar sobre temas que hasta hace bien poco pertenecían al ámbito privado de cada uno. Dentro de poco nos prohibirán rascarnos los güebos en público. ¿Pero para qué?¿Qué más les da a ellos que me rasque si me pica? que fume, que beba, o que me guste introducirme objetos por el ano. Esto es retórica no sodomía, quizá debería escribir en segunda o en tercera persona. Que te gusta introducirte objetos por el ano. ¡A ti!

El Club Bilderberg se reunió el 3 de junio de 2010 en Sitges (Barcelona, España). A la reunión asistieron, entre otros, de la Reina Sofía y del presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que también ha sido invitado a las jornadas donde se debaten temas económicos y políticos sin hacer públicas las conclusiones. Las sesiones se realizaron en el hotel Dolce.

Bueno, nosotros tampoco hacemos públicas las conclusiones a las que llegamos hace unos días tomando unas copas en Cosmic Charlie´s House, pero tampoco es ningún secreto que estas reuniones suelen acabar con sus miembros peor de lo que empiezan, y la conclusión siempre es la misma; boca estropajosa, dolor de cabeza, cansancio y algún que otro vaso roto ¿ya os dais cuenta de por donde voy no?

Lo que parece claro es que si se juntan los Rothschild, los Rockefeller, los Botín, un par de rusos de estos que se quedaron con la Unión Soviética, y el resto de los poderosos; más o menos entre 100 y 150 personas, una vez al año, no es para introducirse objertos por el ano (por seguir con la analogía anal) sino para metérnoslos a nosotros, pobres parias de la tierra.

Sobre esto hay teorías conspiratorias, todas las que quieras, vas a buscar documentación y de regalo te dan un par de teorías conspiratorias, que si quieren reducir la publación de la tierra en 1.000 millones de personas, para lo cual hay que cargarse a 5.500 millones, que si es una conspiración sionista para conseguir el poder mundial (si ya lo tienen) que si disfrutan con el sufrimiento ajeno y lo hacen todo por joder...

Qué más da, lo que está claro es que esta gente es muy responsable de hambrunas, guerras, y un montón de muertes, que se lavan las manos en sus círculos elitistas, y que se la trae al pairo a todos que se muera un niño cada minuto en el mundo, ¡Coño! a mi me pasa igual, y a ti, cuantas veces pensamos en estas cosas al año, cuantos donativos tenemos que hacer para acallar nuestras conciencias (la verdad es que sale muy barato)

Cuando el gran Alejandro llegó a la India, hará unos 2500 años, uno de los reinos que conquistó fué el del Rey Poro (se escribe así pero seguro que en hindi se pronuncia porro). Para mi este tío es el ejemplo de un gran gobernante clásico (hoy en dia no se podrían hacer algunas cosas que él hacía, eran otros tiempos). Pues bien, el rey Poro decidió en su reinado acabar con el hambre en su país, y lo solucionó de una manera muy sencilla, promulgó una ley que decía algo así, "Aquel poderoso que permita que en su zona de influencia muera alguien de hambre, será condenado a muerte". Y funcionó, joder si funcionó, los que tenían la pasta y la comida no veas como espabilaron.

Alejandro le restituyó todos sus honores y lo volvió a colocar como Rey una vez conquistado su reino, pues consideró que era el mejor para el puesto, y Poro fué leal a Alejandro lo poco que vivió el macedonio.

Y del resto nada más se supo

11 comentarios:

  1. que asko de peña,y todos reunidos en un club que aceptan mascotas, Zp y la reina, interesante.

    en mi casa (Basset Creek) también aceptamos mascotas y balbuceamos pero sin consecuencias para el resto del planeta.

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  2. ostiá, quería corregir la ortografía y he suprimido el debate.
    Rockstar, ese comentario que he borrado sin querer es bastante demagógico, según tú cual es la solución, ¿abolimos el estado (y los impuestos) y dejamos que el mercado y el precio libre lo regulen todo? Claro, olvidaba qe en los paises de libre mercado los ciudadanos son inmortales, no hay hambre, no hay enfermedad, no hay miseria. Hace falta un buen porro para meter en cintura a los mercados y a los gobiernos, ¿dije porro? ¿En qué estaría pensando? Poro

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  3. El viejo truco de atribuir a un error humano una manipulación intencionada. Me recuerda a los peores tiempos de TVE. Pero por suerte uno tiene sus back-ups. Decíamos ayer: Yo, para conspiranoias prefiero la clásica de los masones.Y eso de que el estado ha perdido el control del mercado... más del 50% de lo que se produce en este país, de lo que ganas, lo que gastas,... se lo queda el Estado. No está mal. Pero parece que no es suficiente. A lo mejor suficiente es cuando desaparecen los mercados. Entonces ¿qué pasa? Que al no existir el precio libre es imposible el cálculo económico. No se puede saber qué producir y qué no porque no existe el precio libre. Que se lo pregunten a los cubanos. Los chinos, 50 años y 50 millones de muertos después, al menos algo han aprendido.

    Este texto no puede ser demagógico pues es empírico. Lo realmente demagógico es el reduccionismo maniqueo. Ahora sí que voy con la demagogia: Yo creo que no sólo los Bilberberg, sino tú, o yo somos igual de culpables en todas las desgracias del mundo. Porque ¿acaso no podrías vivir de alguna manera con la mitad de lo que ganas? Pues con esa otra mitad piensa la de vidas que estás dejando de salvar

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  4. Me pareció demagógica la afirmación de los chinos, 50 años y 50 millones de muertos después, pues anda que no morían chinos antes de Mao, a eso me refería.
    Por supuesto estoy de acuerdo, los culpables somos todos, pues entre todos permitimos que esto suceda, pero hay una diferencia entre los que no hacemos nada, y somos culpables de nuestra inacción, y quienes además de permitirlo lo planifican y sacan tajada.
    Como en todo en la vida, hay matices

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  5. Pepín, manipulador, eterno aspirante a censor

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  6. Con lo de los chinos me he quedado corto. Las últimas estimaciones hablan de unos 65-75 millones de fiambres con esos grandes programas como fueron el Gran Salto Adelante (que pretendía ¡mira por dónde! desarrollar al país prescindiendo del mercado) y la terrorífica Revolución Cultural. http://es.wikipedia.org/wiki/El_libro_negro_del_comunismo
    Respecto a lo que decía de dar la mitad de lo que tenemos a la caridad, pues no es tanta demagogia: hay un programa impulsado por Bill Gates y otros magnates con sentimiento de culpa y corazoncito anticapitalista que promueve que los ricos donen una gran parte de lo que tienen para el desarrollo: se llama The Giving Pledge, algo así como la Promesa de Donación. Podéis ver a los ricachones comprometidos en http://givingpledge.org/. Lo que quiere decir que ser rico no te libra de la estupidez que es la megafilantropía. ://revista.libertaddigital.com/contra-la-megafilantropia-1276238197.html

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  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  9. Y la avaricia. ¿No la consideras otra forma de estupidez? ¿Acaso el egoísmo es ahora un sentimiento noble? ¿O es que crees que el dinero nos hace mejores personas? Cuidadín que pisas mierda y luego huele fatal.

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  10. Veo que no te has leído los links, o al menos el último. Tendré que recurrir al corta-pega. Un fragmento: Los ricos no son ricos porque posean una gran cantidad de bienes de consumo susceptibles de ser repartidos entre los pobres, sino porque son propietarios de grandes empresas, tremendamente eficientes, que se encargan de producir lo que los consumidores van demandando. Si ceden la mitad de su patrimonio a la caridad, o bien desarticulan sus empresas o las colocan en manos de gente que previsiblemente no sabrá dirigirlas con el objetivo de generar riqueza; es decir, liquidarían y destruirían medios de producción empleados para satisfacer necesidades de consumo presentes. Algo así como si decidiéramos comernos la caña de pescar en lugar de seguir utilizándola para capturar peces.

    Y no me vengas con escatologías.

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  11. Por seguir con la metáfora de la caña y los peces, un pescador puede tener 100, 1000 o un millón de cañas de pescar, pero siempre tendrá dos manos. ¿Cómo puede conseguir una mayor captura de peces? ¿Distribuyendo las cañas o acaparándolas? Cuando queremos simplificar demasiado perdemos los matices, no creo que sea una cuestión de buenos y malos pero si hay conductas más éticas que otras.
    Lo importante, ¿que tal mañana por la tarde para cargar con unos muebles y tomar un whisky de malta?

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