En febrero de 2009, Joaquin Phoenix aparece sonado y desaliñado en el programa de Letterman y balbucea que deja el cine para dedicarse al hip-hop. El descojone en el programa es generalizado. El Letterman se parte.
Después empieza a "actuar", y la monta gorda en varios sitios.
Aquí un ejemplo en Miami, donde baja a zurrarle a un espectador:
Pero todo era un montaje para un documental falso que dirige su cuñado Casey Affleck: I'm still here: the lost year of Joaquin Phoenix.
O no. Porque los que ya lo han visto mantienen la duda de si todo es realmente un montaje. Aseguran que no queda claro al final de la proyección, tras varias escenas en las que el actor aparece en diversos juegos de nariz y de lengua. Habrá que estar atentos al estreno del "mockumentary".
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